Durante los últimos años el Gobierno chino ha comprado miles de toneladas de oro físico que guarda en sus bancos, a la espera de convertir a su divisa –el yuan- en la nueva moneda de referencia.
Una de las historias que más perduran en el tiempo entre los inversores en oro y los que prevén el colapso del dólar es ésta: China y muchos mercados emergentes están buscando cómo abandonar el sistema de moneda fiduciaria.
Este sistema está dominado actualmente por el dólar. El predominio del dólar permite a los Estados Unidos ciertos tipos de comportamiento en política exterior y en los mercados energéticos.
Los países que no cumplen con los deseos de los EE.UU. se encuentran con sus sistemas de pagos globales congelados y con que sus bancos no pueden realizar transacciones en dólares para abonar las importaciones o para recibir el pago por sus exportaciones. Rusia, Irán y Siria, todos ellos han sido sometidos a este tratamiento recientemente.
A China no le gusta este sistema, al igual que a Rusia o Irán, pero el gigante asiático no está dispuesto a enfrentarse cara a cara con los Estados Unidos.
China prefiere acumular silenciosamente grandes cantidades de oro y está construyendo instituciones financieras alternativas, como el Asian Infrastructure Investment Bank (AIIB) y el New Development Bank (NBD).
Cuando sea el momento adecuado, China anunciará al mundo sus reservas de oro reales y al mismo tiempo dará la espalda a instituciones como las forjadas en Bretton Woods, el FMI o el Banco Mundial.
China va a respaldar su moneda con su propio oro y utilizará el AIIB, el NBD y otras instituciones para liderar el nuevo orden financiero global.
Rusia y otros países serán invitados a unirse a los chinos en este nuevo sistema monetario internacional. Como resultado, el dólar se desplomará, el precio del oro se disparará y China será la nueva hegemonía financiera mundial. Los inversores en oro vivirán felices para siempre.
Esto es lo que está pasando realmente.
Al igual que en la mayoría de los mitos, hay partes de la historia que son verdad. China está adquiriendo sigilosamente miles de toneladas de oro. China está creando nuevas instituciones multilaterales de crédito. Sin duda, China anunciará una revisión al alza de sus reservas de oro oficiales en algún momento del próximo año.
De hecho, Bloomberg News informó el pasado 20 de abril, bajo el titular “El misterio sobre las reservas de oro de China pronto se va a resolver”, que “China podría estar preparándose para hacer públicas sus verdaderas reservas de oro…” Pero las razones que están detrás de la adquisición de oro y de revelar sus verdaderas reservas de este metal precioso no son las que todo el mundo cree. China no está tratando de destruir el sistema actual, lo que quiere es unirse a él.
China entiende que a pesar del fuerte crecimiento y el enorme tamaño de su economía, el yuan no está listo para ser una verdadera moneda de reserva y tampoco lo va a estar en los próximos años.
Es cierto que el uso del yuan está aumentando en las transacciones internacionales, pero todavía se utiliza en menos del 2% de los pagos globales. En cambio, el dólar se utiliza en más del 40%.
El uso en los pagos es sólo un indicio de lo que es una moneda de reserva de verdad. La clave para ser una moneda de reserva no está en el pago, pero sí en las inversiones. Es necesario que exista un mercado de bonos líquidos denominado en la moneda de reserva. De esa manera, cuando los países obtienen la moneda en los mercados tienen un lugar para invertir sus excedentes.
Ahora mismo, si usted obtiene yuanes al comerciar con China, lo único que puede hacer con ese dinero es dejarlo en un depósito bancario o gastarlo en China. No hay un gran mercado de bonos denominados en yuanes para invertir.
Además de un mercado de bonos, se necesita la “fontanería” de un mercado de bonos. Esto incluye una red de operadores primarios; herramientas como los futuros y las operaciones de cobertura; instrumentos de financiación, como los acuerdos de recompra, derivados y canales de liquidación; y un buen estado de derecho para resolver disputas, acreedores garantizados y hacer frente a las quiebras.
China no tiene ninguna de estas cosas en la escala necesaria o nivel de madurez suficiente. El yuan no está listo para el prime time.
China tampoco está lista para lanzar una moneda respaldada por el oro. Incluso si tiene 10.000 toneladas de oro –mucho más de lo que admite tener en la actualidad- el valor de mercado de ese oro es sólo alrededor de 385 mil millones de dólares. La oferta monetaria de China en el M1 en abril de 2015 fue aproximadamente de 5,4 billones de dólares. En otras palabras, incluso en el mejor de los casos para China, el oro representa alrededor del 7% de su suministro de dinero.
Históricamente, los países que deseaban poner en marcha el patrón oro con éxito necesitaban el 20-40% de la oferta de dinero en oro con el fin de hacer frente al pánico bancario en el mercado. China podría reducir su suministro de dinero para llegar al 20%, pero esto sería extremadamente deflacionario y provocaría que la economía china entrase en una depresión que daría lugar a una fuerte inestabilidad política. Así que eso no sucederá.
En resumen, China no puede tener una moneda de reserva, ya que no cuenta con mercado de bonos, y no puede tener una moneda respaldada en oro porque no tiene ni de lejos suficiente oro.
Entonces, ¿cuál es el plan de China?
China quiere hacer lo que EE. UU. hizo, que es permanecer en un estándar de papel moneda, pero hacer esa moneda lo suficientemente importante en el mundo de las finanzas y del comercio para que China tenga influencia sobre el comportamiento de otros países.
La mejor manera para hacerlo es aumentar su poder de voto en el FMI y tener al yuan incluido en la cesta del FMI para determinar el valor del derecho especial de giro. Conseguir esas dos cosas requiere la aprobación de Estados Unidos porque EE. UU. tiene poder de veto sobre cambios importantes en el seno del FMI. EE. UU. puede interponerse en el camino de las ambiciones chinas.
La solución es una especie de gran acuerdo en el que China conseguirá el estatus que quiere dentro del FMI, pero EE. UU. obligará a China a comportarse de la mejor manera. Esto significa que China debe mantener el yuan vinculado al dólar en o cerca del nivel actual. También significa que China puede tener oro, pero no puede hablar de él. Con el objetivo de “unirse al club”, China debe jugar con las reglas del club.
Las reglas del juego dicen que se necesita una gran cantidad de oro para jugar, pero no se puede reconocer públicamente. Por encima de todo, no se puede tratar al oro como dinero, a pesar de que el oro siempre ha sido el dinero.
Los miembros del club tienen su oro a mano por si acaso, pero públicamente lo menosprecian y fingen que no tienen ningún papel en el sistema monetario internacional. Se espera que China haga lo mismo. Es importante tener en cuenta que China no va a actuar a favor del interés de los inversores de oro, actuará de acuerdo a sus intereses.
Por otro parte, sólo porque el gran acuerdo esté a la vista no significa que será fácil que se lleve a cabo. Ambas partes están compitiendo por tener influencia.
Beijing lanzó su propio banco de desarrollo para ejercer presión sobre el FMI. El Tesoro de Estados Unidos culpa al Tea Party de los retrasos en la aprobación de nuevos votos de China en el FMI. Mientras tanto, la Casa Blanca no hace nada para acabar con el bloqueo en el Congreso. La Casa Blanca está feliz de dejar a China a la deriva mientras el juego tiene lugar detrás de unas puertas cerradas.
Mientras tanto, China anunciará probablemente el aumento de sus reservas de oro a finales de este año. Pero no esperes fuegos artificiales. China tiene tres cuentas donde guarda el oro – el Banco Popular de China, PBOC; la Administración Estatal de Divisas, SAFE; y la Corporación China de Inversión, CCI.
China puede mover suficiente oro hacia el Banco Popular de China cuando esté lista e informar al FMI para que permita que el yuan esté en el del derecho especial de giro. Mientras tanto, puede ocultar oro en el SAFE y en el CIC hasta que lo necesite.
Seguramente, China también será admitida en la cesta del derecho especial de giro a finales de este año. Lejos de poner en marcha su propia moneda respaldada en oro, China reconoce que el derecho especial de giro es el verdadero dinero del mundo, en lo que se refiere a las grandes potencias.
¿Por qué China tendría más ganas que la Reserva Federal o el Banco Central Europeo de abandonar el dinero fiduciario? Todos los bancos centrales prefieren el papel moneda porque pueden imprimir ese tipo de papel. ¿Por qué iban a querer terminar con el monopolio que tienen?
El oro sigue siendo el activo más seguro, y cada inversor debe tener algo en su cartera. El precio del oro irá aumentando significativamente en los próximos años. Pero al contrario de lo que se lee en los blogs, el oro no va a valer más porque China se enfrente a los EE. UU. o por el lanzamiento de una moneda respaldada en oro.
Irá aumentando su valor cuando todos los bancos centrales, incluidos los de China y Estados Unidos, se enfrenten a la próxima crisis de liquidez mundial, peor que la de 2008, y los ciudadanos recurrirán al oro para preservar su riqueza en un mundo en el que la confianza en los bancos centrales se ha perdido.
Cuando esto suceda, puede que el oro físico no esté disponible. El momento para construir su reserva de oro personal es ahora.
Jim Rickards
Jim Rickards acumula más de 35 años de experiencia trabajando en banca de inversión en Wall Street. Sus libros “Currency Wars” y “The Death of Money” han copado las listas de los más vendidos del New York Times y actualmente es el editor de Strategic Intelligence, un newsletter sobre finanzas líder en Estados Unidos.
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