La revolución de la energía de esquisto en los EE.UU. ya ha impulsado grandes cambios en la economía global.
El uso de la tecnología de ‘fracking’ ha liberado grandes cantidades de petróleo y gas en los EE.UU.. Pero mientras que el petróleo es un mercado mundial, el gas natural no lo es. Lo que ha dado como resultado que el gas natural es mucho más barato en los Estados Unidos que en cualquier otro lugar.
Como resultado, las empresas de industrias intensivas en energía, han estado moviendo sus negocios allí, un proceso llamado ‘relocalización’.
Pero ‘relocalización’ no es el único gran cambio. La enorme brecha entre el precio del petróleo y el precio del gas natural está empujando a las empresas a encontrar usos para el gas que parecían demasiados problemáticos para ser aprovechados. Eso significa que el esquisto ya está en camino de revolucionar otro sector, el de la industria del transporte…
El gas natural está alimentando cada vez más vehículos
A pesar de la reciente disminución, el precio del crudo sigue siendo alto en términos históricos. Mientras tanto, el precio del gas natural en los EE.UU. está tocando fondo. Esta situación brinda incentivos para sustituir el gas natural por el petróleo, siempre que sea posible. Ahora el gas natural esta incursionando en uno de los mayores mercados importantes: el transporte. El gas natural comprimido (GNC) y los vehículos a gas natural licuado (GNL) están creciendo poco a poco en popularidad en los usuarios industriales de EE.UU..
De hecho, actualmente más de la mitad los nuevos camiones de recolección de residuos funcionan con gas natural. Y como Mike Ramsay informo en el Wall Street Journal, «los operadores de algunas de las mayores flotas de camiones de Estados Unidos, incluyendo Lowe, Procter & Gamble, y [grupo de logística] United Parcel Service están acelerando el cambio a gas natural de su flota «.
Según el WSJ, los camiones pesados representan sólo el 1% de la flota de vehículos en EE.UU., pero consumen una quinta parte del combustible. Por el momento, el costo del gas natural es de alrededor de $ 1.50 por galón menos que el diesel.
Fácilmente, deducimos por qué tiene sentido para cambiar a gas natural, mientras dure la enorme brecha entre los precios. Brendan Marasco del Motley Fool reconoce que UPS podría ahorrar alrededor de $ 17 m por año al remplazar sus camiones a diesel por una flota de GNL. En general, alrededor del 5% de todos los camiones pesados a vender el año que viene van a funcionar con gas natural, frente a alrededor del 1% en 2013. Pero hay otros temas a considerar. El gas natural desde el punto de vista ambiental, también es mas limpio que el diesel o la gasolina. Este es un factor fundamental, porque en el largo plazo, los gobiernos van a incrementar impuestos o darán mayores regulaciones a los combustibles «sucios». Una última ventaja es que el gas natural inflige menos desgaste en los motores. Eso significa menores costos de mantenimiento.
No sólo es una solución para los camiones, sino también para los trenes. Como John Kemp escribió en una nota de Reuters, Canadian National Railways ya está operando un tren a GNL en la región petrolera de Alberta. Tambien el ferrocarril de Warren Buffett, el Burlington Northern-Santa Fe está probando trenes a GNL.
No es fácil encontrar un lugar para cargar combustible
Uno de los problemas de mayor complejidad para el desarrollo de los vehículos a gas natural es la cuestión de la recarga de combustible. Como el Wall Street Journal señala, las empresas suelen utilizar sus propios garajes para abastecerse de combustible, en lugar de depender de una red de estaciones de servicio.
Pero Clean Energy Fuels, fundada por el conocido explorador de petróleo T Boone Pickens, esta construyendo una cadena de estaciones de servicio de gas natural en los EE.UU. . Actualmente tiene más de 400.
Incluso se esta trabajando para facilitar el uso domestico de los vehículos de gas natural.
Por ejemplo, según reporta el New York Times, Eaton Corporation está desarrollando una estación de servicio de gas natural hogareño destinada a los conductores comunes. El objetivo es tenerlo listo antes de finales de 2015. «Si Eaton puede ofrecer este producto a un precio razonable, representaría un importante cambio en las reglas de juego.»
En resumen, hay mucho interés en este sector. De manera similar a la forma en que la revolución de esquisto tomó a todos por sorpresa, hay una buena probabilidad de que los vehículos de gas natural podrían adoptarse más rápidamente de lo esperado. Vale la pena recordar, como Treacy Eoin de Fullermoney especifica, que los grandes petroleros, están con firmeza detrás de este cambio, «tanto Exxon Mobil y Royal Dutch Shell producen más gas natural que de petróleo».
Por supuesto, cuanto más sea utilizado el gas natural, la diferencia entre el gas natural y los precios del crudo serán menores, en particular en el mercado de exportación de gas natural de EE.UU. a medida que este aumente.
Pero como señala Kemp, no pasará mucho tiempo antes de que el gas natural este tan firmemente arraigado en el mercado, que la diferencia de costo será lo menos importante para su progreso. «Si la actual brecha entre el gas natural y el crudo se mantiene durante otros dos o tres años, debería ser suficiente para que el gas natural instale una importante cabeza de playa en el mercado del transporte».
¿Cómo podemos beneficiarnos con esta situación?
Si está interesado en hacer una pequeña baza en el sector, una empresa de riesgo para investigar a fondo es Clean Energy Fuels (Nasdaq: CLNE). Esta acción de energía limpia no se ha movido mucho desde la última vez que la analizamos, hace un año. Es sin duda un paso arriesgado ya que no se espera obtener ganancias antes de 2016. Pero si el gas natural se convierte en una gran parte del sector del transporte en los EE.UU., entonces debería estar bien situada para obtener ganancias.
John Stepek – Editor, MoneyWeek
(Nota de la redacción: Ver desarrollo del GNC en Argentina e Italia)