El peso económico de China llevo a muchas multinacionales, desde varios años atrás, a invertir en China. Ahora con el volumen alcanzado, deben aceptar la presión del país anfitrión.
Las compañías globales, invirtieron en China por su potencial. La realidad es que se transformo en un mercado con peso propio que influye en las ganancias de las empresas. Pero China no es un país Occidental, y tiene normas de procedimiento a las cuales se deben adaptar.
En general, se fija en dos sectores: la defensa del consumidor y el automotriz. Algunos grupos y medios de defensa del consumidor afirman que ciertas empresas deben ser presionadas para mejorar sus prácticas de servicio al cliente. A titulo de referencia, un artículo de la agencia oficial de noticias Xinhua reclamo que determinados productos innovadores y la agresiva estrategia de marketing, seguramente se refería a Apple, la han hecho imperturbable ante las quejas del consumidor. Como consecuencia, Apple tuvo que disculparse por sus normas de servicio al cliente, como respuesta a las críticas de los medios estatales.
En el otro frente, el automotriz también se hace sentir la presión. Y con una razón muy atendible. Cerca de 7 de cada 10 autos vendidos en China son de marcas extranjeras. En 2012, las ventas en China de Volkswagen representaron el 28 % de todos los vehículos vendidos por la firma. Tambien el 30 % de General Motors. Ante la denuncia de un canal de televisión de que algunos de los autos de la firma alemana (VW) sufrían problemas de mantenimiento, se vio impelida a dar un comunicado que llamara a revisión 380.000 vehículos. El costo del “mea culpa” puede alcanzar a u$s 618 millones.
En el sector alimenticio, compañías como Yum Brands Inc. y McDonald’s Corp. Sufrieron importantes bajas en sus ventas luego que medios estatales los acusaron no atender rápidamente los problemas con proveedores de pollo.
Las políticas del país han cambiado e impactado en las empresas extranjeras. Según Xi Jinping, nuevo presidente, aseguro que se intensificaran las medidas anticorrupción, y se promoverá el desarrollo de marcas locales.
El mercado es muy grande y su potencial aun mayor. Las multinacionales están convencidas de cual es el camino a seguir,…y lo están siguiendo.
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