Pasamos una semana intensa en la ciudad de Bombay, India. Estuvimos reunidos con más de 500 inversiones indios charlando sobre economía, inversiones y dinero.

La ciudad nos impacto, enorme pobreza, pero también enorme progreso y ganas de trabajar. Una nueva lección sobre como todos, sin excepción, podemos acceder al progreso si nos lo proponemos.

Bombay es la ciudad de los contrastes. Es que uno se puede encontrar con los dos extremos de la riqueza y la pobreza en una misma cuadra. Nos pasó de estar caminando por la ciudad y de repente encontrarnos en una esquina con dos personas durmiendo en el medio de la calle junto a dos monos. Pero caminar otras cuadras y toparse con la casa más cara del mundo con un valor de un billón de dólares construida por uno de los tantos billonarios indios.

Pero lo que no cambia en ninguno de los lugares que estuvimos en Bombay es la pasión que tienen los indios por el comercio, por el libre intercambio de bienes y servicios. Le cuento el caso que más me impacto.

El domingo pasado visitamos una de las villas miserias más grandes de Bombay llamada Dharavi. Millones de personas viviendo en condiciones muy precarias. Hasta ahí lo que uno se espera cuando visita una villa. Pero lo que nos sorprendió fuertemente fue ver tanta actividad comercial e industrial que se daba dentro de la villa durante este día domingo.

Por un lado la villa estaba repleta de vendedores ambulantes. Personas que armaban sus puestos para vender desde verduras hasta relojes o anteojos. Todo lo que se imagine, se vendía dentro de la villa. El comercio en pleno día domingo era incesante, frenético. Pero por otro lado, había cientos de casillas donde se producía algo, desde reciclado de plástico hasta ropa y sábanas, metales, máquinas para producir lo que se imagine, cueros, macetas y mucho más. Con muy pocos recursos los indios se las arreglaban para producir, para comerciar, para generar dinero. Y todos, sin excepción, tenían su teléfono celular en la mano.

Esto me hizo acordar a una frase del ex presidente de Israel Shimon Peres que leí en el libro del periodista José Benegas llamado “Hágase tu voluntad” que decía lo siguiente:

“He conocido a mucha gente de todas partes del mundo y puedo decir que, al final del día, todo el mundo persigue lo mismo: un cargador de iPhone…”

Usted puede hablar de ideologías, de grandes pensadores, políticas y religiones, pero todos, sin excepción al final del día queremos vivir bien y progresar. Aún los indios que tienen una cultura tan diferente a la occidental, también quieren tener la posibilidad de tener su iPhone… y lo sorprendente es que lo están consiguiendo.

La muestra de ganas de trabajar, de libre comercio e intercambio que vi en la villa de Bombay es elocuente. Si India aún no progreso más, si India aún no saco a más personas de la pobreza, es simplemente por culpa de los políticos que se ocupan de regular, poner restricciones y trabas. De los políticos que se encargan de beneficiar a sus amigos mega empresarios. ¿O por qué usted se cree que hay tanta desigualdad en India?

¿Realmente usted se cree que hay tanta desigualdad en India por el libre comercio, por el mercado? ¿O esta desigualdad se da por los monopolios ficticios que los políticos inventan para sus amigos?

India tiene una población de 1.250 millones de personas. Hace un par de décadas la inmensa mayoría de estas personas era pobre, no tenían el más mínimo acceso a las cosas que a usted o a mi nos parecen naturales, como las cloacas, las heladeras, etc. Pero hoy la historia es muy diferente. Según un estudio de la consultora McKinsey, en el 2005 sólo había 50 millones de indios dentro de la clase media, un 5% de la población. Para el año 2025 se espera que la clase media este compuesta por casi 600 millones de indios, el 41% de la población.

Sí, India va a incorporar a la clase media a cientos de millones de personas durante los próximos años. Por eso dentro de la conferencia que participamos organizada por la empresa Equitymaster, una especie de Inversor Global indio, el tema más mencionado fue el de las “Ciudades inteligentes”.

¿Qué son las ciudades inteligentes? Son ciudades nuevas que está construyendo el gobierno de India que buscan alojar a 1 millón de personas cada una. Inteligente se refiere a que tienen que ser ciudades autosustentables, conectadas, limpias, seguras. Imagine la mejor ciudad del mundo, así van a ser estas nuevas ciudades que se están construyendo desde cero. El gobierno ya comenzó a construir una, pero el objetivo es construir 100 más.

¿Sabe cual es el gran riesgo que se mencionó que amenaza este ambicioso objetivo? Sí, adivinó, la corrupción es la gran amenaza, el llamado “Capitalismo de amigos” es lo que puede provocar que este objetivo no se logre.

En India, al igual que en gran parte del mundo, el capitalismo de amigos es una plaga que provoca grandes millonarios protegidos por los políticos pero también enormes sobrecostos e ineficiencias que terminan pagando todos los pobres. Y en India hay muchos pobres. Muchas personas que quieren salir de la pobreza. Personas que vía sus teléfonos celulares están accediendo a un mundo nuevo gracias a Internet. Que quieren ser parte del progreso.

Que están dispuestos a trabajar y muy fuerte para ganarse esta oportunidad. No piden que nadie les regale nada. Quieren trabajar. Solo quieren que los políticos les den esa posibilidad. Que se corran del medio y dejen a los indios seguir comerciando, como siempre lo hicieron, pero esta vez a escala global.

Porque los indios son excelentes comerciantes, excelentes negociadores. Y gracias a la globalización los indios tienen la oportunidad de llevar esa habilidad a escala global. Muchos ya lo hicieron, muchos ya están comerciando con todo el mundo. Varios de estos emprendedores estuvieron en la conferencia que participamos. Ahora el desafío es masificar esta tendencia.

Tengo firmes sospechas que lo van a lograr. Es que Internet y la globalización hoy son más fuertes que el poder de destrucción de los políticos. Los cambios pueden tardar, pueden ser dolorosos, pero el mundo entro en un carril del que no tiene marcha atrás.

Algunos pensamientos adicionales…

La semana pasada en la nota llamada “No se deje idiotizar” le proponía que dejemos de escuchar noticias de la Argentina. Que no ganábamos nada estando al tanto de la novela de terror diaria que es la Argentina. Y que donde teníamos que poner nuestras energías era en otro lado.

No le voy a mentir, no le voy a decir que no sé qué pasó en el país durante la última semana…, pero mi exposición a los medios argentinos fue mucho más baja. Eliminé la radio y la televisión y sólo me limité a leer el diario una vez por día.

Y el panorama no cambió mucho esta semana. Sin prisa pero sin pausa todo se desintegra cada vez más. El país tanto económica como institucionalmente está devastado. Viendo cómo se desarrollan los acontecimientos, me quedan dos grandes dudas:

1 – El kirchnerismo parece estar perdiendo de una vez por todas muchos votos. El 99% de los argentinos sabe del caso Nisman y lo condena. Parecería que ya no están dispuestos a seguir votando al gobierno según muestran las primeras encuestas. Ante este escenario, me pregunto, ¿el oficialismo se va a ir mansamente del poder en diciembre si pierde las elecciones…? ¿Se va a ir para seguramente en pocos meses después terminar en la cárcel…?

2 – Si el kirchnerismo llega a diciembre va a dejar un país destruido, tanto económica como institucionalmente. Desde el punto de vista económico tenemos un país en default, con enorme déficit fiscal, con alta inflación, en recesión. Desde el punto de vista institucional una República semi destruida. ¿Tiene sentido que la oposición siga discutiendo entre ellos temas sin importancia? ¿No tiene más sentido planear un gobierno de coalición que dentro de los próximos cuatro años intente reconstruir el país volviendo a las bases de una democracia moderna?

Preguntas que por ahora no tienen respuestas…

Federico Tessore

Inversor Global Argentina   | 7-02-2015

http://www.igdigital.com/2015/02/en-el-fondo-todos-queremos-un-iphone/